Al amanecer, pintando con mariposas
Al amanecer, especialmente si la noche ha sido fría, las mariposas todavía están heladitas, cubiertas de rocío. Cuando sale el sol y llena de color la escena, ellas todavía no pueden volar y tenemos cierta libertad para poder seleccionar exactamente la luz y el encuadre que queremos. Si además no sopla ni la más mínima brisa que nos moleste para hacer fotos, podemos disfrutar de unos momentos breves pero verdaderamente mágicos. Durante unos minutos, a veces, me da la impresión de que dejo de ser un atolodrado fotógrafo persiguiendo insectos, para pasar a ser una especie de pintor que ensaya diferentes mezclas de luz natural y artificial.
Esta foto está hecha con dos flashes, uno por delante y otro por detrás y arriba de la mariposa. Los flashes los sostenía yo, uno con cada mano. La cámara estaba en el trípode y disparé con un cable y MLU (o sea, con el espejo levantado para que la vibración no la moviera). El color del fondo es de los primeros rayos de sol sobre los cereales a punto de ser segados.
Comentarios
saludos,
cristina
Las orugas de estas bellas mariposas blanquinegras se alimentan de varias especies de gramíneas como la de la foto.
Gracias!!
Mad,
Estoy viendo que eres un tremendo naturalista. No sabia (entre otras cosas) que las melanargias se alimentan de gramineas. Eso explica su abundancia en este viejo sendero al lado de los campos de cereales.
Carmen,
Al hacer estas fotos estan literalmente en mis manos. Para la siguiente foto (que ya subire) tome un primer plano de la camara. Al despertarse mueven los labios y sacan la lengua que es como una espiral enrollada. Es muy bonito poderlas ver tan cerca.