La lengua de la serpiente
Natrix maura, click para ampliar. Aquí empieza esta historia.
El otro día, dejamos a la serpiente resignada, abandonada a su suerte (o eso creía yo, Macroinstantes explicó que su abandono es una táctica para no ser devorada). En cualquier caso, ese era mi plan: aprovechar la situación para fotografiarla.
Tumbado en el suelo, cerca de ella, hice fotos, medité sobre encuadres, sensibilidad, profundidad de campo y tiempo de exposición. Pero, según pasaban los segundos, la serpiente observó con sorpresa que no le ocurría ninguna calamidad. Un soplo de esperanza recorrió su sistema nervioso. Sacó la lengua para olerme, y con asco observó que yo seguía allí. Pero miró al río, vio que no estaba lejos y entonces se desenroscó, recuperó su porte viperino y huyó serpenteando.
Después de haberla tenido en la mano y haber notado su tacto de cera, que delicia poder verla desplazándose de nuevo con seguridad.
El ojo naranja, recorte de la foto anterior.
Cuando llegó al río, pensé que yo ya había conocido a la serpiente de agua. Era otro. Ahora quiero fotografiar a la víbora.
El otro día, dejamos a la serpiente resignada, abandonada a su suerte (o eso creía yo, Macroinstantes explicó que su abandono es una táctica para no ser devorada). En cualquier caso, ese era mi plan: aprovechar la situación para fotografiarla.
Tumbado en el suelo, cerca de ella, hice fotos, medité sobre encuadres, sensibilidad, profundidad de campo y tiempo de exposición. Pero, según pasaban los segundos, la serpiente observó con sorpresa que no le ocurría ninguna calamidad. Un soplo de esperanza recorrió su sistema nervioso. Sacó la lengua para olerme, y con asco observó que yo seguía allí. Pero miró al río, vio que no estaba lejos y entonces se desenroscó, recuperó su porte viperino y huyó serpenteando.
Después de haberla tenido en la mano y haber notado su tacto de cera, que delicia poder verla desplazándose de nuevo con seguridad.
El ojo naranja, recorte de la foto anterior.
Cuando llegó al río, pensé que yo ya había conocido a la serpiente de agua. Era otro. Ahora quiero fotografiar a la víbora.
Comentarios
Con las víboras, te aconsejo que uses guantes. La gente las ha perseguido, apedreado, pisado, dado muerte a garrotazos y atropellado desde los tiempos de Adán y Eva en el Edén hasta nuestros días. Te será difícil convencerlas de que solo les quieres hacer una foto. Sospecho que la imagen que ellas tienen de nosotros es bastante peor que la que tenemos nosotros de ellas (y por nosotros me refiero a la gente en general, yo sé que a tí y a mí nos caen bien, pero no somos representativos)...
Aunque ya me he apuntado a un curso de manipulación de reptiles.
Lo de Félix claro que estaba preparado, como todos los documentales de naturaleza en todo el mundo. Lo que se le puede criticar es su afán de protagonismo y su énfasis en la épica. Y el presupuesto enorme que manejaba.
Pero el método utilizado era el usual, incluso innovaron muchas cosas. Gracias a la serie se protegió mucha fauna que de otro modo hubiera desaparecido. El balance global es positivo, un amigo holandés, naturalista profesional, me dijo que "Félix puso España en el mapa".
Me parecen tan buenas las fotos, que incluso podría llegar a caerme bien el bicho.
No tengo más nada que decir.
Bon capde! besos!
Ya quisiera yo tener un pedacito de tu talento (y también de la paciencia) para hacer algo así...
¿Será idea mía, o en el ojo de la serpiente se reflejan el Sol y algunos árboles?
Un abrazo desde Santiago de Chile.
Vaya fotos nos has puesto otra vez.
Un saludo
¡Alucinantes las fotos! Estoy deseando ver las de la víbora, pero ten cuidado no te acerques mucho. Porque, la cámara puede servir como escudo, pero estas bribonas tienen una gran habilidad para detectar el calor corporal y diferenciar el frío plástico o metal de tu dedo calentito.
He buscado inutilmente una foto en la que aparece como un paraguas transparente del que solo sale el objetivo de la càmara. Lo utilizaba un fotografo para acercarse lo indecible a una vívora sin riesgo de ser picado. Lo siento, no lo encontré.
Inga, es una maravilla de animal. Después de varias sesiones todo el mundo acaba por cogerla con las manos.
Jorge, no digas esas cosas que tu eres un artista ! Se ven los árboles y si te fijas, mi cabello y la silueta de un flash (que no usé para esta foto)
Erna, muchas gracias!
Mad, la pobre Maura que no sepa no actúa. A mi siempre me cayó bien Carmen. No te preocupes que con la víbora, si llego a poder hacer la foto, tendré mucho cuidado. Las he visto dos veces.. sin cámara. Imperdonable.
Th, mira esta foto.
Me gusta. De hecho le diré a un amigo naturista y fotógrafo como tu que entre a verte. Seguro que intercambiais fotos.
Si quieres fotografiar bichos, si tienes tiempo y ganas en extremadura tenemos "pa da y tomá" y ya que estás interaso en las vívoras te diré que la Junta repobló hace unos años muchas zonas con el bichito de marras.
Hoy sábado ya, el amigo del que te hablo se va a fotografiar nutrias, a ver si tiene suerte. Volveré a visitarte y ojo con los bichos, mi abuelo siempre decía "a bicho que no conozcas no le tires del rabo"
Saludosss
Aquí no he visto ninguna, en Aragón, dos. Pero hace casi 10 años.