De entre las ruinas (I)
Hitler y su arquitecto Speer pasaron muchas tardes decidiendo los detalles de las obras faraónicas que debía erigir el tercer Reich. Les preocupaba el aspecto que tendrían dos o tres mil años después, una vez reducidas a ruinas. Querían que fueran tan espléndidas como las de los templos griegos y romanos. Por ello evitaban en la medida de lo posible el uso de hormigón armado, ya se sabe que los hierros retorcidos hacen feo.
Estas cosas pensaba yo el otro día estando en Turquía (por motivos de trabajo). Una tarde, a última hora, nos escapamos a visitar unas ruinas romanas. La luz era espléndida y disfruté muchísimo, como un auténtico Frikosal. Para mi, visitar este tipo de cosas supone sobretodo una experiencia estética, de modo que no intento entender que es cada cosa, simplemente paseo asombrado, hago fotos y toco las inscripciones de las piedras. Esto es lo que me gusta hacer, ¿será cosa de mi ignorancia?.
La primavera estaba en su apogeo. Entre las columnas caídas corrían unos lagartos impresionantes, crecían las amapolas y copulaban los ortópteros. ¿Que hubieran pensado los amigos Hitles y Speer si me hubieran visto a mi tumbado en el suelo fotografíando bichos y florecitas entre las ruinas?
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Comentarios
AS - Mein Furrer, das ist ein Frikosal, frikosalus fotograficus, una cucarracha bolchevique isquierdossa.
AH - Arrg!, Goebbels!, llama a la Wehrmacht que arrasen toda la zona.
AS - Pero mein Furrer, nos ha llamado amigos en su 'post' no podemos hacerrle esto.
AH - Nain! tambien llamarr 'amigo' a la cucarracha TreeHugerr en este 'post' como se atrreve a comparrarnos con semejante basurra. Arrasadlo todoo!
AS - Yabold mein furrer! perfecto, despuess poemos construirr un Golf con urrbanisasion de lujo. Ya!
Para ser adulto primero hay que ser niño (si antes no te ha abortado una central nuclear, se entiende). De la misma manera, para aprender, razonar, justificar "las cosas", uno primero debe sentirse atraído por ellas; acariciarlas cuando sea posible (me gustaría acariciar una ortiga, o un leopardo, pero no suele ser posible). El interés primero es el que despierta preguntas. A pertir de ahí, uno puede optar por buscar respuestas, o por seguir mirando y tocando, embobado, todo aquello que le hace tilín.
Sabes que el amigo Mies tenia que ser el arquitecto de Hitler?. Pero a este no le gustaba el vidrio, no era un material para su carácter. Como Mies le lamia el culo siguió presentando maquetitas hasta que hitler le chafó una de un puñetazo.
Entonces se exilió en estados unidos... e hizo el Seagram, oh Seagram!!! xD
Treeh,
Y ademas, que no soy de raza aria ni de lejos, jeje.
Mosquito,
Yo se que esto de pasearme entre las ruinas como un tonto sin preocuparme de que es cada cosa suena un poco contracultural pero no se, es lo que me sale. Ya lo hice en Grecia, tambien un dia al atardecer en Delfos. El guarda estaba borracho y nos dejo entrar a mi y a mi Santa (era el viaje de novios, alucina), sin pagar entrada ni decirnos nada. No habia nadie mas, solamente las piedras increibles, esa luz y las flores. Unos momentos irrepetibles.
Guillamatus,
Jeje, que buena historia. A mi no me gusta especialmente mucho el Mies, lo siento.. Y el amigo Adolph, menudo chiflado, no se si has visto "El hundimiento", esa escena en que aparece con Speer y dice "Mejor que bombardeen Berlin, asi podremos reedificarlo mas facilmente". ¿Que tenia la arquitectura de Speer que le gustaba tanto a Hitler? No quiero ni imaginarmelo.
No acepto la cultura, la educación, como conjunto de axiomas y/o imposición de criterios, por lo que entiendo muy bien tu actitud y emociones, y las comparto sin puntualizar nada. Antes bien (que académico suena esto de "antes bien", que listo soy) Antes bien, repito, entiendo tu paseo como imprescindible punto de partida para sentir, sin más. Lo demás, viene después.