El Llobregat contaminado con fármacos
Una de las cosas que más me ha impresionado en los últimos meses es esta noticia: el río Llobregat está contaminado con fármacos, en particular antiinflamatorios y antidepresivos.
No se trata de que las farmacéuticas tiren cajas y cajas de pastillas al río, es mucho más grave y más sintomático de cual es la situación real del mundo que hemos creado. Son los orines de las personas que, como usted y yo, de vez en cuando nos tomamos un ibuprofeno para el dolor de espalda, o unas pastillitas que receta el médico para que no estemos tristes (y a la que uno se descuida ya son de por vida). Nuestro organismo no metaboliza completamente esas sustancias, y van a parar al río. En el río hay depuradoras, y en su desembocadura justo al lado del aeropuerto incluso viven pájaros prodigiosos como el martín pescador o este aguilucho que ilustra la entrada (que fotografié junto al Llobregat). Las depuradoras no son mágicas: eliminan el gran excremento y la inmundicia más obvia, pero hay muchas moléculas contaminantes e imagino (no soy experto en el tema) que para filtrarlas todas haría falta una cantidad enorme de energía, debe ser imposible. Somos tantísimos que ese simple gesto de tomarnos una pastilla (con receta médica) e ir al baño ya es una agresión contra el medio ambiente. Y después, aguas abajo, son otros los que beben nuestros orines.
Lo primero que debemos preguntarnos es si la cantidad encontrada es realmente significativa ¿no será que los cromatógrafos son tan sensibles que detectan cantidades irrisorias? Parece ser que si son cantidades relevantes (del anterior enlace): El estudio ha revelado una posible relación causa-efecto entre los fármacos y los invertebrados, de manera que en donde hay más concentraciones de antiinflamatorios y betabloqueantes (contra la hipertensión) se observa un aumento de las larvas de insectos que no han prosperado. (Una vez más, los insectos, menospreciados por los ignorantes, demuestran su importancia como bioindicadores)
Lo segundo es ¿cuales son las causas?. Yo creo que la primera debe ser la enorme cantidad de gente que vive a orillas del pobre Llobregat. Y la segunda, el elevado consumo de fármacos por persona. Aunque a nadie le gusta pasar hambre si tiene comida al lado ni aguantar el dolor o morirse de infarto si dispone de una pastilla que lo soluciona, yo diría que el sistema sanitario de nuestro país tiende a favorecer el consumo de medicinas. Y habría que ser muy inocente para creer que las empresas farmacéuticas son ajenas a esta situación. Pero pensando en los psicofármacos y en los antidepresivos en particular, este consumo no se entiende si no es asumiendo que en realidad vivimos como animales enjaulados, angustiados y enfermos. ¿Piensan que casi todos nosotros deberíamos ser felices porque tenemos comida para comer y una cama para dormir? Es muy importante comprender lo que le ocurre al pulpo enjaulado, les ruego que lo lean.
Dijo Batiatto en el 86 (y entonces no entendí la letra),
Non servono tranquillanti o terapie
ci vuole un'altra vita.
..
Non servono più eccitanti o ideologie
ci vuole un'altra vita.
Hay que hacer algo, pero cada día son más los que miran por la ventana con la esperanza de ver caer un meteorito que lo mande todo a la mierda.
No se trata de que las farmacéuticas tiren cajas y cajas de pastillas al río, es mucho más grave y más sintomático de cual es la situación real del mundo que hemos creado. Son los orines de las personas que, como usted y yo, de vez en cuando nos tomamos un ibuprofeno para el dolor de espalda, o unas pastillitas que receta el médico para que no estemos tristes (y a la que uno se descuida ya son de por vida). Nuestro organismo no metaboliza completamente esas sustancias, y van a parar al río. En el río hay depuradoras, y en su desembocadura justo al lado del aeropuerto incluso viven pájaros prodigiosos como el martín pescador o este aguilucho que ilustra la entrada (que fotografié junto al Llobregat). Las depuradoras no son mágicas: eliminan el gran excremento y la inmundicia más obvia, pero hay muchas moléculas contaminantes e imagino (no soy experto en el tema) que para filtrarlas todas haría falta una cantidad enorme de energía, debe ser imposible. Somos tantísimos que ese simple gesto de tomarnos una pastilla (con receta médica) e ir al baño ya es una agresión contra el medio ambiente. Y después, aguas abajo, son otros los que beben nuestros orines.
Lo primero que debemos preguntarnos es si la cantidad encontrada es realmente significativa ¿no será que los cromatógrafos son tan sensibles que detectan cantidades irrisorias? Parece ser que si son cantidades relevantes (del anterior enlace): El estudio ha revelado una posible relación causa-efecto entre los fármacos y los invertebrados, de manera que en donde hay más concentraciones de antiinflamatorios y betabloqueantes (contra la hipertensión) se observa un aumento de las larvas de insectos que no han prosperado. (Una vez más, los insectos, menospreciados por los ignorantes, demuestran su importancia como bioindicadores)
Lo segundo es ¿cuales son las causas?. Yo creo que la primera debe ser la enorme cantidad de gente que vive a orillas del pobre Llobregat. Y la segunda, el elevado consumo de fármacos por persona. Aunque a nadie le gusta pasar hambre si tiene comida al lado ni aguantar el dolor o morirse de infarto si dispone de una pastilla que lo soluciona, yo diría que el sistema sanitario de nuestro país tiende a favorecer el consumo de medicinas. Y habría que ser muy inocente para creer que las empresas farmacéuticas son ajenas a esta situación. Pero pensando en los psicofármacos y en los antidepresivos en particular, este consumo no se entiende si no es asumiendo que en realidad vivimos como animales enjaulados, angustiados y enfermos. ¿Piensan que casi todos nosotros deberíamos ser felices porque tenemos comida para comer y una cama para dormir? Es muy importante comprender lo que le ocurre al pulpo enjaulado, les ruego que lo lean.
Dijo Batiatto en el 86 (y entonces no entendí la letra),
Non servono tranquillanti o terapie
ci vuole un'altra vita.
..
Non servono più eccitanti o ideologie
ci vuole un'altra vita.
Hay que hacer algo, pero cada día son más los que miran por la ventana con la esperanza de ver caer un meteorito que lo mande todo a la mierda.
Comentarios
Me ha entrado tristeza al leerle, tanto por mí (sí, vivo encarcelada y y esclava de muchas cosas)como por el resto de seres vivos, los cuales tendrían la libertad de la que nosotros carecemos si no nos empeñásemos en jorobársela (por no decir jodérsela.)
Me llevo su entrada al "Face" para compartirla. Me parece muy buena.
Gracias.
Hay soluciones, seguro que si. Está el consumismo, tan denostado pero tan útil (navidad, navidad..), está la droga y las adicciones (a la red, al sexo, al trabajo)..
Y nos quedan pequeños rincones, santuarios, donde las mantis todavía copulan salvajemente y las cigarras cantan a pleno pulmón.
Salgan, si pueden, de las ciudades, aunque no sean más que unos minutos y verán como la observación de esta naturaleza que vive completamente a su aire, al margen de las ordenanzas municipales, les resulta enormemente beneficiosa.
Lo tengo comprobado, en mi mismo y en varios amigos, gente que llegó a estar mal y que tuvieron un punto de inflexión en sus vidas al aprender a admirar a saltamontes y libélulas. Uno de mis proyectos es, con toda la humildad del mundo, organizar salidas de naturaleza con este objetivo.
Exacto, yo hace muchos años que salgo a contemplar la naturaleza, es totalmente adictivo. Mejor que cualquier otra droga de las que menciona, le hace sentir a uno profundamente bien, quizá porque se siente aunque sólo sea por unas horas esa libertad de la que estamos privados. La vuelta a nuestros orígenes nos produce felicidad, de ahí que me cuestione (tal como hace usted) nuestra forma de vida actual, que no parece producirnos felicidad, sino todo lo contrario, la muestra está en el Llobregat.
Mientras tanto a mí también me pasa lo mismo que a Joselu, me atrae los desiertos, los inmensos campos de lava de Islandia, bañarme en invierno en el mar, es la misma sensación.
Pero no me puedo quejar, no me puedo quejar.
Por hacer una broma, aunque sea de mal gusto, debo decir que tengo la suerte de vivir en la cabecera de un río, y que no bebo los meados de otros.
Se puede buscar otra vida, si no estamos contentos con la que tenemos, de hecho yo creo que se debería.
Felquera
No he pillado lo interesante de Paulo Coelho, pero puede que lo haya leído con prejuicios, por eso de sus libros de autoayuda.
Lo de Coelho es una ironía, no se si suficientemente clara. No puedo con ese hombre.
Que bueno lo de que caíste al mar.
El pecado de Onán es genial.
Deberías publicar un libro, escribir un libro.
La medicina ha avanzado como nunca y no tenemos que sufrir el dolor insoportable de una extracción de muelas.
Quizás valga la pena aprender a disfrutar de las pequeñas cosas. Usted, mi querido y Egregio Agrimensor es un especialista en eso. Está mucho peor la gente que desprecia la naturaleza y que es incapaz de maravillarse observando como liba una mariposa.
El trabajo es una maldición pero mucho peor es no tenerlo.
La clave es ser capaces de buscar la felicidad en el tiempo que nos queda: ese que es sólo nuestro y usar la estrategia del pulpo para escapar por la rendija por muy pequeña que sea.
Creo que las personas buscamos lo que no tenemos y la felicidad total (o casi) está al alcance de pocas personas.
Solo puedo recomendar el atreverse a cambiar los aspectos que no nos gustan, ya que no vamos a tener otra vida más. La reencarnación en vida, como dice Vd.
Me gustaba esa expresión, no era gastar las horas muertas, sino vivir esas horas, aprovechando el tiempo en algo tan bonito como admirar los insectos, o las plantas, o los brotes.
Supongo que el Llobregat, no tendrá tanta concentración de farmacos y orines, sino una ínfima cantidad, detectada por esos aparatos prodigiosos.
Ojalá salga adelante el proyecto de salidas a la naturaleza, haría lo posible por acompañarte a alguna, y conocerte en un ambiente mucho más natural que el de cualquier ciudad putrefacta.
Un fuerte abrazo
¿Qué nos quedará dentro de unos años?
...
Un abrazo libre de farmacos. ;)
Por otro lado, si las tuviéramos, podríamos seguir 'fardando', ya que afortunadamente para el río, no desahogamos el exceso de líquidos en esas aguas o en cualquier otra.
Cambiando de tema, ha visto usted el dpreview de la G11? mis 5 centavos: G10 claramente superior en detalle a isos bajas. G11 marginalmente superior en detalle a isos altas.
Y esa es la gente normal, y los raros somos los que nos vamos a ver ranas por la noche o a fotografiar las estrellas y a disfrutar de los aguiluchos laguneros.
El otro día conocí a una chica de Massachussets que me dijo que Walden está muy masificado. Casi me muero.
El Rio LLobregat lo estamos matando al igual que, al Rio Segura en Alicante. Ya no solo la depuradoras, no dán a vasto, sino el propio rio, al cual, se le agotan los recuros y las fuerzas de autoregenerarse.
Namasté
A mi un valenciano me dijo muy orgulloso que el Turia (creo) no lleva ni una gota de agua a su desembocadura, como debe de ser, para que tomen ejemplo en otras partes. Y no era precisamente un ignorante. Hay que hacer mucha didáctica.
Realmente Thoreau parece que hubiera escrito para ti.
Hacía tiempo que no tenia tiempo de conectarme, ...me gustaba más el título de "NO PUEDO EVITARLO" o bien "LA DEPILACIÓN NO ES LA SOLUCIÓN"
Totalmente de acuerdo, la sanidad publica receta innecesariamente excesos de medicamentos (hay premios y recompensas economicas en recetar más un producto que otro de una misma especialidad farmaceutica).
También el usuario realiza un mal uso del mismo! Se automedica, o no sigue las pautas concretas de dosis de la propia medicación.
Pero el motivo de todo es que ello es les interesa(empresas farmaceuticas) estar como esta, ya que genera intereses economicos.
Sanidad publica debería recetar por nº de pastillas según los días requeridos del tratamiento, y no por caja de pastillas que siempre sobran y se quedan en casa para en otra ocasión realizar un mal uso.
Se debería realizar una sensibilización y educación-aprendizaje del mismo.