La libélula negra
A mi me parece que la libélula negra es la más elegante de todas. Pero es extremadamente reservada, raras veces tolera la presencia humana a menos de cinco metros. Si os acercais más, se alejará tranquilamente dando aletazos grandes y perezosos, como si tuviera las alas de terciopelo. Yo pensaba que no podía volar con más energía hasta que vi a dos machos peleando y persiguiéndose a toda velocidad. Lo que debe ocurrir es que no nos considera una amenaza especialmente grave y se marcha, pero con desgana. De todos modos, para poder fotografiarla hay que tener la paciencia de los grandes santos, incluyendo a Job (que al ser del Antiguo Testamento yo creo que propiamente no es un santo). Se llama calopteryx haemorrhoidalis . ¿Por qué el nombre de este animal tan bonito tiene que ser nada menos que haemorrhoidalis ? (en efecto, de hemorroides). Es que si os fijais, en la parte posterior del abdomen, por debajo, los últimos segmentos son rojos, como si padeciera de la triste dolencia anal...
Comentarios
Preciosas fotografías, tierra adentro, mar afuera.
Saludos.
Por donde yo ando suele haber poco movimiento. Por mi parte me conformo con no estorbar.
Ando yo muy meláncolico y filosófico últimamente. Esa foto me pega.
La segunda también porque si uno filosofa realmente acaba dándole el máximo valor a la belleza que nos envuelve.
Pero si no estuvieras, te lo perderías, y, lo que es peor, tampoco nos lo enseñarías.
Preciosa la foto de la entrada anterior :-)
Salut.
Ahora también lo soy bajo el techo de mi casa si mi esposa y mi hijo están a mi lado y a salvo los 3, pero la soledad absoluta, coger unos prismáticos y que no haya nadie en absoluto en todo lo que te da la vista, de vez en cuando, sigue siendo gloria pura. Y mal que les pese a muchos, aún es posible en bastantes sitios de esta piel de toro. Aprovechémoslo y hagamos proselitismo.
De lo que dices de “no quisiera estar” entiendo un respeto a un lugar que tal como le ves no le falta nada.
Ahora, el agua tan transparente requiere casi a gritos que te metas en el, aún estropeando esta sensación de claridad y limpieza.
Donde yo “no quisiera estar”, es en un paisaje bonito recién nevado.
Pienso, que beber la naturaleza así, es sentir espiritualidad sin más.
Me ha hecho reir lo del principio de indeterminación.
Es esto que comentas, Erna. Pero me bañé, claro. Hacía un calor increible.
Josep, ojo a la melancolía.
Felquera, es una gran suerte no ver gente. Lo que hace que una persona sea persona es justamente, creo yo, la ausencia de otras personas. Si no, eres como arena en la playa, y no un granito.
Feixa, efectivamente, todavía es posible.. cuesta, pero se puede.
Buenas noches.. mañana, otra foto, una un poco especial para mi.
Eres un friki (genial para mi gusto).
Buenas fotos, Dr.