Oasis
Despues de mucho rato conduciendo entre extensiones desmedidas de arena, aparecieron unas montañas lejanas, y entre ellas, un palmeral exhuberante e incluso un arroyo de agua tibia con pozas, ranas y pequeños saltos de agua. En mitad del Sahara, aquel vergel era estrictamente inverosimil, como se supone que deben ser los oasis.
Este lugar era pequeño y precioso como una perla en la nieve. Ya estaba en avanzado estado de disneylandización cuando yo lo vi, de modo que a estas alturas debe ser una simple tienda de suvenirs.
Comentarios
Marruecos estudia comprar una central nuclear a Rusia. Me temo que las orejas del retón micky lo llevan claro.
saludos