Los astros vagabundos
Yo creo que todas las culturas humanas, desde los Inuit hasta los Fueguinos deben haber observado el cielo nocturno (a excepción, claro está, de los modernos habitantes de las ciudades que por la noche ponemos la tele para seguir el curso de los escándalos políticos). El caso es que a poco que uno se fije, resulta claro que las estrellas se mueven (aparentemente) cada noche y que además se mueven siguiendo ciclos anuales. Estos movimientos, aunque complicados, se realizan de forma acompasada, es decir: cada estrella se mantiene a la misma distancia aparente de sus vecinas.
Pero después de haber pasado muchas noches mirando los cielos, alguna persona con buena memoria debería darse cuenta de que hay algunos astros que, además de sus movimientos diarios y anuales, parecen moverse entre todos los demás. Los griegos los llamaron errantes, vagabundos.. y esa palabra pasó al latín y ha terminado por convertirse en planetas.
Ya hace tiempo que quiero fotografiar periódicamente a Marte durante unos meses para poder ilustrar su movimiento entre las estrellas, pero esto está resultando complicado a causa de las nubes. De momento, he podido fotografiar a Venus (izquierda) y a Mercurio (derecha) tres días y he superpuesto las fotos de forma que Venus parezca estar siempre en el mismo lugar. De esta forma, el movimiento relativo entre ambos se hace evidente. No obstante, esto es engañoso puesto que Venus en realidad también se mueve entre las estrellas del fondo, pero en el crepúsculo no hay ninguna estrella cercana lo suficientemente brillante como para servir de referencia.
Desde que alguien por primera vez observó estas extrañas luces errantes en el cielo, hasta que finalmente Isaac Newton (apoyándose en muchos otros) resolvió casi por completo el enigma, tuvieron que pasar muchos miles de años. Y el esfuerzo necesario para hacerlo impulsó el nacimiento de las ciencias físicas, motor de la tecnología. De modo que yo creo que no es exagerado decir que si ahora ustedes están viendo esta pequeña entrada, se debe a la enorme curiosidad que despertaron en nuestros antepasados los astros vagabundos.
Creo que si en algún lugar surge vida inteligente e incluso se inventa la escritura, pero por alguna razón no se ven las estrellas, fuente inagotable de enigmas, el desarrollo de la ciencia se retrasará mucho. Esto podría suceder en Europa, satélite de Júpiter, donde (forzando un poco la imaginación) podría ser que vivieran seres inteligentes en un mar atrapado debajo de una corteza de hielo (¿como sería su mitología?). El 2020 se lanzará una primera nave que estudiará el grosor de la corteza de hielo, y si es factible, mucho después otra expedición tratará de perforar el hielo para observar el interior. Demasiado lento, en mi opinión, para el enorme interés de estas exploraciones.
Pero después de haber pasado muchas noches mirando los cielos, alguna persona con buena memoria debería darse cuenta de que hay algunos astros que, además de sus movimientos diarios y anuales, parecen moverse entre todos los demás. Los griegos los llamaron errantes, vagabundos.. y esa palabra pasó al latín y ha terminado por convertirse en planetas.
Ya hace tiempo que quiero fotografiar periódicamente a Marte durante unos meses para poder ilustrar su movimiento entre las estrellas, pero esto está resultando complicado a causa de las nubes. De momento, he podido fotografiar a Venus (izquierda) y a Mercurio (derecha) tres días y he superpuesto las fotos de forma que Venus parezca estar siempre en el mismo lugar. De esta forma, el movimiento relativo entre ambos se hace evidente. No obstante, esto es engañoso puesto que Venus en realidad también se mueve entre las estrellas del fondo, pero en el crepúsculo no hay ninguna estrella cercana lo suficientemente brillante como para servir de referencia.
Desde que alguien por primera vez observó estas extrañas luces errantes en el cielo, hasta que finalmente Isaac Newton (apoyándose en muchos otros) resolvió casi por completo el enigma, tuvieron que pasar muchos miles de años. Y el esfuerzo necesario para hacerlo impulsó el nacimiento de las ciencias físicas, motor de la tecnología. De modo que yo creo que no es exagerado decir que si ahora ustedes están viendo esta pequeña entrada, se debe a la enorme curiosidad que despertaron en nuestros antepasados los astros vagabundos.
Creo que si en algún lugar surge vida inteligente e incluso se inventa la escritura, pero por alguna razón no se ven las estrellas, fuente inagotable de enigmas, el desarrollo de la ciencia se retrasará mucho. Esto podría suceder en Europa, satélite de Júpiter, donde (forzando un poco la imaginación) podría ser que vivieran seres inteligentes en un mar atrapado debajo de una corteza de hielo (¿como sería su mitología?). El 2020 se lanzará una primera nave que estudiará el grosor de la corteza de hielo, y si es factible, mucho después otra expedición tratará de perforar el hielo para observar el interior. Demasiado lento, en mi opinión, para el enorme interés de estas exploraciones.
Comentarios
Si instalas stellarium en tu ordenador normal de sobremesa prueba a buscar Orion (es fácil) y después podrás verlo incluso desde la ciudad.
Con Jordi Busqué alguna vez hemos pensado que un día (una noche) podemos organizar una salida a un lugar que no esté a más de una hora en coche y ver el cielo; él sabe muuuucho más que yo.
Yo sería partidario de los planetarios de cartón. Piense que aunque los stellarium sean muy prácticos, son tan fáciles que uno se olvida de pensar!
En mi opinión creo que tendríamos que volver voluntariamente a encontrar las cosas manualmente, porque nos estamos atrofiando! Y no creo que yo sepa más que usted, recuerde a los astrofísicos que no sabían donde estaba la polar...
Por otra parte, con estos instrumentos pensamos pero de otra forma, dejamos las tareas que pueden automatizarse para los ordenadores y nos concentramos en otras cosas.
Ojala algun dia pueda hacer esas fotos de noche o con un telescopio, que aunque tengo uno, no se que es lo que necesito para hacer las fotos...
Un saludo y animo.
http://bitacoradelvientomontanasdeburgos.blogspot.com/
Yo me apuntaría a esa salida nocturna si tuviera la opción o me quedase más cerca. Te ruego lo avises con tiempo por si pudiera cuadrar asistir, me encantaría...
Un fuerte abrazo
...y seguro que ambas son errantes.
Muchas gracias.
Un beso.
B.T.C.M.
Pobres europeos –¿europeanos?– viviendo como si estuvieran siempre metidos en el metro. ¿Aterrizará allí la Nave Nodriza para liberarlos? Aunque a lo mejor les ocurre como a la mayoría de los terrícolas les importa un carajo ver el cielo o no o que se pueda ver o no.
En realidad las fotos están hechas con una cámara normal y un objetivo de 180mm. Venus es tan brillante que incluso un teléfono movil puede captarlo, para Mercurio ya hace falta una cámara :)
Me hubiera gustado ver esa película. Estoy dejando de ver cine, incluso en casa. Mal asunto.
Gracias por su comentario y buenas noches.
Yo creo que los terrícolas hacen lo que ven hacer por la tele, es así de triste. Las ciudades se llenaron de edificios de cristal porque todos los capulletes querían un despacho como el de JR.
Todo el mundo dice lo mismo, que antes se veía más. Una pena que este tema solamente preocupe a unos pocos.
Mirar el cielo es algo a lo que te vas acostumbrando y si poco a poco vas conociendo alguna constelación, aunque yo soy un ignorante, al verlas te sientes como en casa. Es muy bonito, como todo lo que tiene que ver con la naturaleza.
Muy interesantes sus reflexiones a cerca de los errantes.
Hace no mucho estuve en uno, Naboo, fui como invitado de la princesa Amidala (no confundir con Amígdala, que no la gusta)y realicé algunas fotografías, pueden verlas los que estén interesados en la siguiente dirección:
http://arsnatura.blogspot.com/2010/04/la-torre-del-palacio-de-la-princesa.html
Felicidades porque no hay mayor mérito para un maestro que la capacidad de inspirar.
Por cierto en una ocasión te di una localización para este tipo de fotos a la que no me respondiste, no se si fue porque no la leiste o por que no te parecia que por allí pudiera haber buenas fotos nocturnas, si al final vas a hacerla estoy seguro de que repetiras.