El canto de la rana arborícora y el concepto de pecado en fotografía
El canto de la rana arborícora es furioso y desesperado. El macho de rana común, según me dijo el herpetólogo que me guiaba, ensaya diversas melodías para atraer a las hembras. Pero la arborícora es monótona y se basa únicamente en su potencia. Su canto se puede oír a kilómetros de distancia. Que misterio más grande, siendo de noche oír su canto a lo lejos y no saber donde están. Y después, encontrar su charca oculta, iluminar con la linterna y verla cantando en el agua, como hipnotizada por el deseo. Todavía más, encontrar a una de ellas cantando desde lo alto de un arbusto. Las demás, desde el agua, trataban en vano de hacerla callar.
Le pregunté al herpetólogo si para impresionar a las hembras es una buena estrategia cantar desde lo alto, como hacían antiguamente los obreros de la construcción. Vaciló un poco y al final me dio la respuesta: Es una tontería cantar desde lo alto, los demás machos no pueden expulsarte pero la cópula al fin se realizará en el agua. Por mucho que cantes, rana, será en vano (a menos que haya alguna estrategia secreta que ignoramos los humanos).
Dispuesto a fotografiar esta rana cantadora tan especial, metí la cámara entre las ramas y pude hacer unas fotos con cierta dificultad. Me marché contentísimo. Pero al llegar a casa observé que el reflejo del flash había quedado un poco feo. Con paciencia y photoshop fui pintando la rana de rana, allí donde la luz la había blanqueado. ¿Es esto pecado mortal Padre yo pregunto?
Le pregunté al herpetólogo si para impresionar a las hembras es una buena estrategia cantar desde lo alto, como hacían antiguamente los obreros de la construcción. Vaciló un poco y al final me dio la respuesta: Es una tontería cantar desde lo alto, los demás machos no pueden expulsarte pero la cópula al fin se realizará en el agua. Por mucho que cantes, rana, será en vano (a menos que haya alguna estrategia secreta que ignoramos los humanos).
Dispuesto a fotografiar esta rana cantadora tan especial, metí la cámara entre las ramas y pude hacer unas fotos con cierta dificultad. Me marché contentísimo. Pero al llegar a casa observé que el reflejo del flash había quedado un poco feo. Con paciencia y photoshop fui pintando la rana de rana, allí donde la luz la había blanqueado. ¿Es esto pecado mortal Padre yo pregunto?
Comentarios
Solo debe como penitencia seguir fotografiandola...
Ups me poseyó un cura...
Buenisima la explicación y las fotos de verdad estan retocadas?? no se nota nada!!!! Ahora entiendo algo de algunas famosas...
Besototes y sigeu disfrutando de las vacaciones!!!
Y de la manera que las empleas, es a veces necesario para dar a la imagen una calidad mas cercana a la percepción que han tenido tus sentidos.
Un saludo
No seria el caso de las manipulaciones a las que nos tiene acostumbrados el mundo mediático que nos rodea, desde el monstruo del lago Ness hasta las fábricas de armas químicas en Irak.
El retoque puede mejorar una foto mediocre, mientras que la manipulación es un insulto al espectador, restando valor a la obra creada a la vez que envilece al autor.
Queda pués con Dios.
Impresionante cómo hincha su garganta al cantar!
Saludos!!!
A mi me gusta la rana con brillitos, que se le va a hacer. Por otra parte, ya hace años que se sabe que la fotografia es una representación tan artificial, como la pintura. Asi que ¿pecado?
Salutacions
No se si puedo perdonarme :)
Fijese en su propio ejemplo, el termometro marca 4 pero... hacia viento? cual era la humedad? hay tablas científicas para encontrar la temperatura aparente en esas condiciones. Tenga en cuenta tambien la calidad del coñac que puede hacer subir unos grados la temperatura aparente.
No hay duda en que andas buscando el perdón en esta entrada-confesión pero no voy a ser yo quien te lo dé ya que ando también haciendo equilibrios en alguna foto sobre la delgada linea roja.
La rana, en su mejor momento, es una pasada!
Mi ignorancia habitual en estos bichos la habría situado en los trópicos.
Jesús A.