Historia de Q

Q se desplazó a la capital para unos trámites de especial importancia. Pero al bajar del tren a primera hora de la mañana, vio que toda la ciudad estaba cubierta por una capa de líquido marrón, viscoso y maloliente. Las calles, los innumerables coches, las mesas en los bares. Todo estaba cubierto de asquerosa mierda. La gente parecía no darse cuenta, seguían con sus asuntos. Una señora limpiaba el cristal del escaparate de su pequeña librería. Un camarero charlaba animadamente de fútbol con los clientes. Un barrendero recogía las hojas caídas.

¿Como es posible que no se den cuenta de que todo eso no sirve para nada entre tanta mierda? Siguen comportándose como si tal cosa, como si la mierda no estuviera allí. ¿Que sentido tiene seguir con la rutina de cada día si todo esta lleno de mierda? En estas condiciones nada tiene el menor interés. Y era imposible retirar semejante cantidad de inmundicia. Incluso si lo hubieran intentado. Pero parecía evidente que no eran conscientes de que sus vidas estaban enterradas entre la mierda.

Q creyó que era inútil tratar de hacer nada mientras la capital estuviera llena de mierda y regresó a su casa. El tren también se había llenado de inmundicia, pero los mendigos seguían pidiendo monedas y los jóvenes hablando de amores y desamores. También su ciudad estaba asquerosamente sucia. Su calle, su casa, todo estaba impregnado de porquería. Le pareció más absurda que nunca. Estaba claro que ni las calles mal trazadas, ni las casas feas ni las interminables obras servían para nada. Todo era un asco. Se tendió en la cama, incapaz de hacer nada.

Pasaron más de seis horas hasta que su mujer llegó a casa con los niños que gritaban, lloraban y reían. Q seguía sin poder hacer nada, abrumado por el peso de tanta porquería. ¿Como es posible que no lo vean? Entraron gritando en el cuarto.

-¿Es que piensas quedarte aquí tirado todo el día sin hacer nada?
-Pero ¿no os dais cuenta?, todo es un asco, todo es inútil.

Unos días más tarde, el médico (casi sin mirarle) le recetó unas pastillas de por vida.

-La mierda, mi querido Q, está dentro de su cabeza. Cuando eramos monos salvajes y en primavera hacía sol, debíamos ser felices, emprendedores, apasionados. En otoño, era mejor ser prudentes por que se avecinaba el mal tiempo. Ahora, mi querido Q, todo eso ya no existe. Somos como los pulpos cautivos y en su cabeza es siempre invierno. Tómese estas pastillitas, apenas tienen efectos secundarios, dejará de ver esas feas mierdas e incluso es posible que le guste el fútbol.


Me marcho un par de días, no seáis muy duros con los comentarios.

Comentarios

treehugger ha dicho que…
La quimica del cerebro es todo un campo por descubrir. Se puede ser feliz rodeado de mierda y se puede uno deprimir tambien rodeado de mierda.

La mierda es una constante que aumenta a medida que destruimos los entornos naturales del planeta. Al igual que en un reactor nuclear se puede alcanzar un punto de no retorno. Creo que nuestra civilización puede que este cruzado en este momento ese punto. Esto se acaba. Deprimamonos en la cama o practiquemos el 'carpe diem'.

Que bien escribes cabron.

-th
Los viajes de Gawi ha dicho que…
Muy buena la metáfora.
Ha llegado el punto de inflexión, o es la masa crítica?...ummmmm bueno, no sé; o megaevolucionamos a digimon y se hace una limpiecita o tanto güano nos va a sepultar. Yo soy optimista, fíjate, hasta creo que otro mundo mejor es posible y todo..jajaaaa
Le Mosquito ha dicho que…
Esta estupenda mierda parece inspirada por don Fernando Fernán Gómez.
Como algún día se me ocurra tomar esas pastillitas... entonces sí que me iré a la mierda.

Lamento contradecir a Treehugger cuando asegura:
"Qué bien escribes, cabrón"
Muy al contrario, yo pienso:
"Cabrón, qué bien escribes"
nomesploraria ha dicho que…
Disiento:
cabronazo, que bien escribes.
Anónimo ha dicho que…
En referencia a la mención que de mi persona se hace en anteriores entradas de esta bitácora diré:
La única razón ante Dios del acto sexual es la procreación y éste debe realizarse dentro de la institución sagrada del matrimonio.

Me parecen de mal gusto las comparaciones y los comentarios sobre insectos y su vida sexual.
Mad Hatter ha dicho que…
Por entradas como esta es por la que te pasé el "Thinking Blogger Award", puede que sea parte de la mierda, sí, pero también puede ser parte del palo de la escoba con la que, si todos nos ponemos a barrer, a lo mejor conseguimos algo, o por lo menos hemos hecho algo por intentarlo, pero deprimirse y quedarse parado no sirve de mucho, salvo para amargarnos la vida, te lo dice alguien al que también le han tenido que recetar pastillas para soportar la mierda, empezando por su propia mierda.
¡Ánimo! y enhorabuena "Friko".
Animal de Fondo ha dicho que…
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Paco Becerro ha dicho que…
Me recordó esa historia en que el infierno es una inmensa piscina de mierda en la que el nivel de la mierda llega a la altura de la nariz de los condenados mientras por un altavoz se oye:

- No hagan olas. No hagan olas.

Y tampoco estoy de acuerdo ni con Treehugger, ni con Mesié le Mosquito ni con Nomesploraría, para mi lo correcto sería añadir...

- Qué cabrón, qué bien escribes.
Anónimo ha dicho que…
nomesploraría ordenó...

Disiento:
cabronazo, que bien escribes.


Cuando parece que quiso ordenar...

Di siento, cabronazo, que (para eso) bien escribes

Arreglada la frase, debe entenderse que el escritor ha de lamentarse por su escrito, y por gozar de recursos para expresarse mejor.
G & G ha dicho que…
Seré més concís: crees una mena d'addicció ... i canviaré, si em permets, allò de cabronàs per germanet. Una abraçada.
Ge (de G&G associats. El Masnou)
Anónimo ha dicho que…
Volviendo a la mierda, o a la realidad que es casi lo mismo. Noticia de hoy en la cadena SER: Al paso que vamos dentro de 20 años puede haberse derretido el hielo del Ártico.
frikosal ha dicho que…
Muchas gracias por vuestros comentarios. Lo siento pero hoy no tengo tiempo para responderos a todos personalmente.

Una persona escribió un comentario algo crítico (que ha borrado, aunque pienso que no debería haberlo hecho). Me pedía una segunda parte con una solución, pero sin pastillas.

Si yo supiera esa solución sin pastillas de ninguna clase, no le quepa la menor duda de que la publicaría.
Animal de Fondo ha dicho que…
Este era el comentario crítico:
Bueno, falta una segunda parte, porque, efectivamente, cuando uno limpia su mente el mundo se despeja. El problema es que la solución de las pastillas es un recurso demasiado fácil -en el cuento, en la realidad no es un recurso siquiera. Siento disentir, pero me gusta más cuando escribes de cosas sencillas, creo que consigues que tengan trascendencia. Sin embargo, ahora has escrito en plan trascendente y se vulgariza un poco el tema. No quiero decir que yo sea capaz de hacerlo mejor, ni mucho menos, pero me gustaría que hubieras sido más abstracto. Si no hubieras llamado a las cosas por su nombre, te hubiera quedado más universal y más sugerente, cada uno podría poner en el cuento algo propio, una interpretación. El cuento sería mejor, más literatura. Será mucho pedir, pero espero una segunda parte donde muestres una solución y nos hagas ver que si lo limpias todo te limpias la mente, pero también si te limpias la mente lo limpias todo. Es más fácil y además es la única forma.
Saludos cordiales.

Entradas populares de este blog

La libélula negra

Los apócrifos, pájaros de barro

La salvación de las libélulas caídas