Mosquita

Se acercó sigilosamente y no la vi, pero de todas las partes descubiertas de mi anatomía, ella fue a posarse justamente en mi mano izquierda. Y ahi si que pude notar sus patitas. La miré detenidamente, perdida en un océano de piel rosada. Se agarraba con las uñas para que no se la llevara el viento. A punto estuve de aplastarla, pero ¿no debemos amar al prójimo? ¿a todos? ¿también a los monstruos y a los parásitos?

También. La picada es en realidad un acto de amor de la mosquita, ella no pica por hambre ni por vicio, pica para sus hijos. Los mosquitos, macho y hembra, se alimentan de néctar de las flores. El macho jamás pica. Pero allí en algún lugar del vientre de la hembra está su ovario, o algún órgano equiparable, esperando las proteínas de mi sangre para poder empezar a generar centenares de huevos. El ávido promotor inmobiliario, el fabricante de minas antipersona, el concejal de urbanismo corrupto ¿ellos también pueden decir que si obraron mal fue solamente para alimentar a sus hijos? Debemos ver en la mosquita picadora a una madre abnegada, una heroína.

De modo que me dejo picar, pero yo lo hago como un acto de amor a vosotros mis lectores, para poder ofreceros humildemente mi sangre. Mi mano derecha fotografía a mi mano izquierda. Y ella se agacha doblando las patas delanteras y como si estuviera arrodillada, hunde su aguijón hasta el fondo, casi tocándome la piel con los ojos. Que bien lo hace, apenas noto como se desliza entre mis tejidos. Es un momento plenamente consciente de íntima unión carnal entre el hombre y la mosquita. Fluye mi sangre hacia su abdomen, y estando ya turgente, su piel refleja los destellos del flash. ¡Ah que pena de reflejos! ¡Que dirán los melladistas si ven esta foto! (Ya lo se: dirán que "los reflejos podrían fácilmente haberse evitado" o "clonado").

¿Y la higiene?. ¿No habrá un reflujo extraño desde el vientre de la bestia hasta mis arterias? ¿A quien habrá picado antes de mi? En la foto ampliada (pinchad para ampliarla todavía más) casi pueden verse los muy peligrosos micro-organismos chapoteando en mi sangre, al lado de ese tubo blanco que debe ser por lo menos el intestino grueso. Pienso por un momento en si debo aplastar a esta criatura inmunda que ha propagado tantísimas enfermedades. Pero como el Profesor Van Helsing, incansable perseguidor de vampiros, tengo un momento de duda antes de asestar el golpe. ¿Ser (Frikosal) o no ser? Y ella aprovecha para salir volando con mi sangre.

Ahora sería de suponer que la mosquita vuela en busca de un amante que fecunde sus huevos. Pero no es así, la naturaleza es previsora y la mosquita copula una sola vez en su vida, antes de lanzarse a la temeraria aventura de conseguir sangre. El macho, inofensivo e ignorante, sigue con su alimentación vegetal.

Con todo mi cariño, dedicado a Le Mosquito. Debo decir que a mi la picadura de mosquito apenas me produce reacción alérgica. Otro tema son las pulgas, los tábanos, las garrapatas y las muy asquerosas sanguijuelas.

Comentarios

Impresionante el antes y el después de la picada. Menudo festín se dió la mosquita y ante lo expresivo e ilustrativo de la imagen comprendo que a alguien pueda molestarle el reflejo pero yo lo que veo es esa textura peluda y ese vientre hinchado de proteina, bastante espeluznante.
Tuvo suerte al elegir la mano, otra le hubiera espachurrado.
Raúl Betadine ha dicho que…
Increíbles las fotos. La información me ha cambiado la perspectiva. A partir de ahora lo pensaré al menos una vez antes de aplastar mosquitas con el pulgar.
Le Mosquito ha dicho que…
Muchas gracias Manel.
Apenas alcanzo a escribir algo más, pero el agradecimiento es sentido, como sentido es tu texto.

Gracias a quien me avisó de que Frikosal había publicado este escrito; tan bello.
Mad Hatter ha dicho que…
¡Jo tío "Friko"! Te has pasao. A mi es que estas cosas de la sangre, los hemófagos y los vampiros me dan mucho repelús.
Carmen ha dicho que…
No me volveré a quejar de una picadura de mosquita. Ahora sé por qué me dejaría quitar la sangre. Pero... no estoy de acuerdo con tu final. Me picaron sanguijuelas en una marcha por una selva. Me picaron en los tobillos, y a un compañero de excursión (al más... ¿idiota?) se le metieron en los calzoncillos... No son esas gordas y negras que hay en el agua, son otras pequeñas, esbletas y negras... Si supiera contar esa historia para conmover tal y como lo has hecho tú con la mosquita, lo intentaría. Y así, quizá, las sanguijuelas tendrían alguna compresión.
Anónimo ha dicho que…
Great shots...these are unbelievable!
Did he get away?
igniszz ha dicho que…
Su martirio y abnegación merece nuestras alabanzas, doctor.

Su gesta quedará recordada por los tiempos de los tiempos, como la de un tal Jesús, que tambien dió su sangre por nosotros.

Te alabamos, doctor.
odette farrell ha dicho que…
Aghhh!

Pues a mi no me gustó tu post.

Aunque acepto que fue muy interesante verle la panza inflada de sangre a ese insecto inmundo. Pero me produjo una sensación terrible verlo.... tuve que pasar rápido la imágen para leer el texto sin tener que seguir viendo esa imágen que me incomodaba en modo extremo.

No me gustan los mosquitos, hay algunos que te dejan piquetes que me torturan por más de una semana con su escozor.

Tendrán su función en la ecología pero yo lo hubiese aplastado de inmediato.
Nefertiti Totonaca ha dicho que…
vaya impresión... qué buenas fotografías... tal vez yo la habría aplastado de un manotazo o al menos espantado, jejeje... me quedaría al igual que a tí, la duda de ¿a quién habrá picado antes que a mí? y me habría remordido la conciencia si la hubiese aniquilado... ni hablar... somos parte de la cadena...
el objeto a ha dicho que…
Alguien debería grabarte algún día en plena acción! me ha costado y maravillado al mismo tiempo imaginarte haciendo esas fotos -impresionantes- del mosquito sobre tu propia piel

Por muchas, muchas, muchísimas veces que me hayan picado mosquitos en todas las partes del mundo, nunca había sabido todo lo que explicas en el post. Increible! lo de la única copulación de la mosquita, lo de que los machos se alimentan de vegetales y no pican... no sé, me siento como una niña de 6 años para quién el mundo está aún por descifrar.
Gracias Frikosal, por tu acto de amor a tus lectores y todo lo que nos explicas,

a mi lo de la madre abnegada de la mosquita me repatea bastante, me repatean en general las madres abnegadas, así que me quedo tranquila, entendiendo y afirmándome en la antipatía que tales bicharrejas me producen,

una última cosa, me gustaría poder tener hijos para explicarles por las noches tus historias, y poder enseñarles cosas tan bonitas,
Anónimo ha dicho que…
Hola frikosal,
muy buenas fotos.
No se si lo tuyo ha sido abnegación o simplemente vicio fotográfico.
Mi pregunta: ¿te hubieras dejado picar sin tener la cámara cerca?
frikosal ha dicho que…
3a,
Si, yo mismo maté otras.

Raul,
Sigue chafandolas..

Mosquito,
A ver cuando te reincorporas, te echamos de menos.

Mad,
Dan repelús, dan.

Carmen,
Es que a mi me dan asco. Solamente las he visto un par de veces. Me meto en aguas muy asquerosas y pensar en esos bichos me da verdadero yuyu. Pero cuenta, a ver si lo supero.

Glenna,
Yes. He (she actually) escaped.

Ignis,
No se me exceda vd. en las metáforas :)

Odette,
Siento que te den asco, pero si les tienes alergia es normal. Yo tengo alergia a la picadura de pulga, no puedo con ellas.

Nefer,
Si. Y lo pensé pero de haberla matado cuando tenía el pincho dentro tal vez hubiera sido peor.

A,
No creas que yo se gran cosa. Es todo tan complicado en la naturaleza! Cuando salimos en grupo me siento un ignorante total. A mi también me repatean un poco las madres abnegadas. Los hijos... no es fácil comunicarse con ellos. A veces escuchan, otras no.

Juanb,
Efectivamente, de no haber tenido la cámara la hubiera chafado. No es abnegación si no vicio. Por eso en las órdenes monacales se hace voto de obediencia. Si cada uno fuera libre de fijarse sus propios sacrificios el convento sería un cachondeo.
Marmorlu ha dicho que…
Un relato totalmente macabro y "erotico"... ;-)
Hace falta valor !
Un abrazote
Luis

PS Ese es un "Tigre", por lo menos !
odette farrell ha dicho que…
Marmorlu,

Erótico??? De dónde? Yo lo veo como un acto masoquista... habrá que preguntarle a Frikosal si su masoquismo se pudo dar gracias a que tenía la cámara cerca, como le preguntó juanb.
frikosal ha dicho que…
Entiendo que te den asco pero la palabra masoquismo, en su sentido literal, creo que es exagerada.

Recuerdo a mi padre haciendo lo mismo, cuando yo era un niño, para que yo viera como pican.

Una picada de mosquito "normal" aquí no es nada, no transmiten ninguna enfermedad, y de todos modos me debieron picar como 20 más esa mañana sin provocarme ninguna reacción. Había millones en esa marisma !

La red anda llena de fotos mucho peores que esta (mejor no te doy un enlace escalofriante que hay).

Es más, un amigo trabaja en control de plagas, los mantiene en el laboratorio y les da de comer con su propia sangre.

Como te decía, si hubiera sido una pulga, un tábano o una garrapata, me lo hubiera pensado.

Nada de masoquismo, curiosidad e interés por documentar esta especie. Que también ocupa su lugar en el mundo.
Belnu ha dicho que…
Genial la historia de la mosquita, y tu entrega sensual a su aguijón, tu sacrificio por la foto.
Anónimo ha dicho que…
Muy interesantes fotos y relato. Me pregunto como puede ser que cuando me quedo encerrado con una mosquita en un dormitorio, a la mañana siguiente tengo media docena de picadas o más. Tan rápido consume la sangre?
hombredebarro ha dicho que…
Emocionantísimo relato. Tan bien descrito como impecablemente documentado. Con humor y amor. Como tiene que ser.
Jesús ha dicho que…
Ciencia en su expresión más pura.

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