Los niños habían de recordar por el resto de su vida la augusta solemnidad con que su padre se sentó a la cabecera de la mesa, temblando de fiebre, devastado por la prolongada vigilia y por el encono de su imaginación, y les reveló su descubrimiento. -La tierra es redonda como una naranja. Úrsula perdió la paciencia. «Si has de volverte loco, vuélvete tú solo -gritó-. Pero no trates de inculcar a los niños tus ideas de gitano.» José Arcadio Buendía, impasible, no se dejó amedrentar por la desesperación de su mujer, que en un rapto de cólera le destrozó el astrolabio contra el suelo. Gabriel García Márquez, Cien años de soledad. Pongan sus astrolabios a salvo que yo creo que en esta entrada vamos a demostrar, por fin y de forma irrefutable, que la tierra es redonda como una naranja. Observen estas fotos, realizadas con unas semanas de diferencia: En esta foto primera foto, hecha en el desierto de Atacama (bendito desierto, ¿alguien reconoce esas rocas?), de izquierda a derecha se ven
Comentarios
muchas gracias!
un saludo Stefan